Es indudable que las mujeres que se encuentran en estado de gravidez deben observar un régimen alimenticio especial. El cual comprenda una comida balanceada y bien completa en todo momento. Por eso la dieta más saludable para embarazadas debe comprender la ingesta de proteínas carbohidratos.

También la madre debe alimentarse con muchas vitaminas, minerales y complementos vitamínicos. Ya que estos proporciones todos los nutrientes necesarios para la adecuada formación de ese nuevo ser que se está gestando.

Una dieta balanceada debe estar integrada por hortalizas y verduras, por cereales, frutas carnes rojas y blancas como las aves y el pescado y otros productos del mar en general. Se debe ingerir suficiente agua diariamente para garantizar el buen funcionamiento del organismo. Y también la buena formación de ese nuevo ser que se está gestando.

Además de todos los alimentos que deben comprender una dieta más saludable para embarazadas. Las madres que se encuentran en estado de gravidez deben tomar las precauciones de llevar un control sobre su estado. Pues deberán seguir todas las indicaciones de su médico tratante.

Se le debe suministrar al organismo algunos alimentos y sustancias que contengan todos los nutrientes que el cuerpo no puede suministrar al niño. Donde la ingesta de ácido fólico es absolutamente indispensable. Así como también la del Hierro, Fósforo, Calcio, Zinc, Selenio, Magnesio y otros minerales que ayudan a formar huesos.

Las grasas saludables provenientes del aceite de oliva, el aguacate, el maní, las nueces y los frutos secos. Y estos son también una magnífica opción para integrar algunas meriendas y comidas fuertes.

El agua por otra parte debe estar todo el día presente en las horas intermedias a las comidas. Por ello, deberán ingerir de ocho a diez vasos al día durante las horas que se encuentran distanciadas en lapsos de treinta minutos de cada ingesta.

Hábitos que deben acompañar la dieta más saludable para embarazadas

El hecho de llevar un buen control del embarazo, debe incluir algunos buenos hábitos. Estos servirán para complementar la dieta más saludable para embarazadas con todo lo necesario para la buena formación del niño. Por tal motivo, veamos cuales deben ser esos buenos hábitos de manera un poco detallada:

Realizar ejercicios

Realizar ejercicios durante el embarazo es una magnífica idea para complementar la dieta más saludable para embarazadas. Pues durante el embarazo las mujeres tienden a volverse perezosas y esto es lo que menos va a gradecer ese nuevo inquilino que se está gestando.

Dar un paseo matutino con una marcha constante por unos treinta minutos no está nada mal. Por contrario esto va contribuir para que se tenga una buena digestión y además que abra el apetito de aquellas futuras mamás que se vuelven inapetentes. El Sol de la mañana es de incalculable beneficio para las embarazadas.

La natación es otra muy buena opción para las futuras mamás que desean mantenerse activas y no engordar más de la cantidad de kilos. Donde se estima que es dentro de los parámetros normales y que no deben sobrepasar los 10 kilogramos.

En caso de no querer salir de casa, también se pueden realizar ejercicios recomendados por el médico dentro del hogar. O en un gimnasio donde el profesional instructor sepa de su nuevo estado y le indique alguna rutina de ejercicios suaves. Ya que estás ayudarán a mantenerse en forma sin poner en riesgo al bebé.

Un sueño completo y reparador

Las mujeres embarazadas deben procurar dormir al menos durante 8 horas por las noches para complementar la dieta más saludable para embarazadas. Y también otras dos horas de siesta para reponer energías y para contribuir con la buena formación del niño.

En caso de que no se pueda descansar lo suficiente o que el insomnio esté presente todos los días. Entonces deberán consultar con el médico tratante para que le indique a la embarazada sobre algunos alimentos inductores del sueño. Y en casos extremos recurrir a sedantes muy ligeros que no afecten el embarazo.

Consumo de suplementos alimenticios

Se debe vigilar muy de cerca la dieta de una embarazada y consumir algunos suplementos que el medico indique. Para que así no falten esos elementos como el Calcio, al Magnesio, el Fósforo, el Hierro, el ácido fólico, el Zinc. Y todo aquello que contribuya definitivamente a la buena formación de los huesos, los músculos, los cartílagos y todos los órganos de ese nuevo ser que viene en camino.

Algunos hábitos que deben erradicarse durante el embarazo

Es indudable que no solo se deben poner en práctica los buenos hábitos para que la dieta más saludable para embarazadas sepa súper efectiva. Sino que las embarazadas se deben desprender de todos aquellos que puedan causar efectos secundarios o malformaciones en los niños que se están gestando.

El consumo del tabaco, la ingesta de alcohol y las drogas deben aparatarse desde un principio por no decir que desde el mismo momento en que una persona planifica traer niños al mundo. Los padres responsables se preparan por lo menos desde un año antes para limpiar su organismo en caso de que tengan malos hábitos.

El sedentarismo es otro de los malos hábitos que pueden afectar a una  mujer embarazada. Por el contrario las mujeres grávidas deben ejercitarse todos los días para combatir el posible sobre peso con la mala creencia de que deben comer por dos y para mantenerse ágiles y flexibles para el momento en que tengan que enfrentarse con el trabajo de parto.

Estricto control del peso

No por el hecho de que las embarazadas deben alimentarse muy bien, esto implica que tengan que comer demasiado y es totalmente incierto que tengan que alimentar dos bocas. Si las mujeres embarazadas no se cuidan pueden aumentar de peso durante el embarazo en una forma poco adecuada y nada aconsejable.

Una mujer no debería ganar más de 10 kilos durante todo el embarazo. De hecho las que no se cuidan y comen sin control, pueden llegar a aumentar hasta veinte kilos y esto solo puede complicar las cosas para el momento de dar a luz. Ya que la tensión muscular puede aparecer trayendo consigo días malos para las futuras madres.

Además una mujer que aumente demasiados kilos durante el embarazo le costará volver a recuperar su peso después del parto. Lo más sensato es someterse a la dieta más saludable para embarazadas y completa. Donde deberán comer al menos unas cuatro o cinco veces al día pero en cantidades bien controladas contando las calorías.

Lo que sí es una buena idea, es que las embarazadas deben eliminar de su dieta todas las frituras y los embutidos. También reducir el consumo de harinas, exceso de sal y de azúcar blanca. Por eso es preferible que se utilice la miel para endulzar y el sucedáneo de sal en vez de la sal marina.

También se puede sustituir la sal condimentando con ajo y con limón. Y de esta manera se le da un buen sabor a los alimentos bajando el consumo de sal o eliminándolo por completo.

Consejos para hacer la dieta más saludable para embarazadas

Como quiera que para poder comer todos los alimentos debemos hacerlo por etapas. Ya que no se pueden consumir todos estos nutrientes en un solo día. Por eso es recomendable que se elabore una especie de menú semanal.

Consejos para hacer la dieta más saludable para embarazadas

Consejos para hacer la dieta más saludable para embarazadas

De esta manera podemos elegir los lunes para carnes rojas, los martes para pollo y los miércoles para cerdo. Luego los jueves para puras frutas, los viernes para pescado y así sucesivamente hacer con las hortalizas, las legumbres y todos los vegetales.

Sin embargo no podemos eliminar de esa dieta diaria los medicamentos, los complementos vitamínicos y el consumo de agua por lo menos en diez vasos por día.

Recuerda que si estás embarazada y necesitas más consejos sobre que comer en el día a día, puedes ponerte en contacto con mi Clínica de Fisioterapia especializada en el barrio de Salamanca de Madrid.

Para las meriendas se deben preparar ensaladas de frutas, yogures y granolas. Y para los desayunos deberán incluir los cereales, los huevos, los lácteos y sus derivados.

Al preparar un menú no se van a escapar ninguno de los alimentos y se puede llevar un control más estricto para que la comida sea realmente balanceada.